Rebeca, 32 años, administrativa

Yo nunca había tenido problemas de ansiedad, conocía a personas que si los padecían, pero no me podía hacer una idea de por lo que estaban pasando. Un día, hace ya unos años, empecé con síntomas de ansiedad, me asusté bastante ya que no sabía que me estaba pasando, sobre todo sentía una falta de control y un miedo muy intenso.

Me sentí muy perdida y muy sola. No lo dude mucho para ponerme en contacto con un profesional que pudiera ayudarme.

Al principio no tenía muy claro que hacía allí, en la consulta con Marta. Yo creía que no tenía ningún problema en mi vida, por lo menos en ese momento, que pudiera desencadenar ese estado de ansiedad en mí. No lo relacionaba con nada que me pasara en ese preciso momento y no lo entendía.

A medida que iba pasando el tiempo y acudiendo a las consultas, iba descubriendo muchas cosas que desconocía de mí y que desconocía que sentía. He de reconocer que en algunos momentos podía ser abrumador, pero poco a poco se iba esclareciendo las causas y los motivos de lo que me ocurría. Empezaba a entender lo que me pasaba y a aceptarme y respetarme a mí misma.

Considero que es importante confiar en esa persona que tienes delante, tu terapeuta y sentirte cómoda, en la medida de lo posible, para poder trabajar todo eso que en nuestro día a día nos causa esa inestabilidad.

Aconsejo a todas aquellas personas que se sienten perdidas, en un momento difícil de su vida, que sienten que nadie a su alrededor les comprende y que parece que todo pierde sentido, a que busquen soluciones. Hay gente muy profesional dispuesta a ayudarte, a descubrir que es lo que te sucede y a salir adelante. A guiarte en momentos de pánico y desesperanza de manera que uno ya no vuelve a sentirse solo. En terapia consigues reunir una serie de herramientas muy útiles para afrontar aquellas situaciones que más nos perturban y nos bloquean.

Para mí ha resultado una experiencia única, un crecimiento y desarrollo personal inmenso y sobre todo, un conocimiento de mí misma en todos los aspectos. Por supuesto me ha servido para aprender a sacar lo mejor de mí y aceptar todo aquello que antes me hacía sentir mal conmigo misma.

He madurado y aprendido muchísimo y lo que me queda!!. Agradezco mucho haber podido contar con esta ayuda en mi camino.

Mucho ánimo y paciencia (que también es muy importante en estos casos saber tener), espero que mi experiencia pueda serviros para animaros a desprenderos de todo tipo de prejuicios y temores, para poder aprender a disfrutar de la vida en toda su plenitud.